Estas son las conclusiones extraídas de un informe realizado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP). Existen comunidades autónomas que se han visto más afectadas que otras por los recortes que desde las administraciones de cada una de ellas se han llevado a cabo y es precisamente este informe el que revela los resultados.
La defensa de la sanidad pública es una batalla que se ha emprendido desde distintas organizaciones de diversa índole, no sólo sindicales o de trabajadores del sector, sino también por parte de los usuarios del servicio sanitario.
La preocupación radica ahora en evidenciar cómo han deteriorado el sistema público, los constantes recortes que se han efectuado en la sanidad pública.
La Comunidad Valenciana, Murcia, Galicia, Madrid y Cataluña son las comunidades autónomas más perjudicadas por los ajustes presupuestarios que se llevaron a cabo desde las administraciones durante el 2011 y lo que va de este 2012.
La Comunidad Valenciana es, sin embargo, la que se destaca por encima del resto, la situación que atraviesa la sanidad pública de dicha región es realmente alarmante, no sólo la falta de empleo en hospitales o los recortes de personal son una constante, sino que además han aumentado en gran medida las listas de espera como consecuencia, mellando gravemente la calidad asistencial.
La reducción en el presupuesto destinado a sanidad en Valencia ha ocasionado resultados desastrosos para el sistema público, que ya partía de un presupuesto bajo.
Cataluña y Murcia tampoco se quedan atrás, allí también se evidencia la crisis que sufre la sanidad pública, por la situación que atraviesan quienes se dedican a trabajar en hospitales o centros de salud, debiendo recurrir a constantes marchas y protestas, repudiando los recortes y evidenciando las dificultades que encuentran en el ejercicio de su profesión.
La cuestión ha llegado a tal punto, que ya no es novedad enterarnos de que en estas comunidades se están reduciendo las plantillas en centros y hospitales, disminuyendo las interinidades y los contratos eventuales.
La calidad asistencial está cayendo, la falta de empleo de médico o enfermero es una constante, las listas de espera aumentan y con ello la crisis parece acentuarse en el sistema de salud público de estas comunidades, pero también de toda España.
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